Te buscaba sabiendo que cuando nuestros ojos se encontraran, todo el pasado y todo el futuro, carecerían de importancia, y solo existiría ese momento, y la certeza increíble que todas las cosas bajo el sol, fueron escritas por la misma mano, eterna e infinita, la de los mil nombres, la que forma mi esencia y la tuya, la que despierta el amor...porque sin esto, no habría sentido para los sueños...

domingo, 12 de junio de 2011

Princesas y heroínas.

Ella era una princesa de lacios cabellos dorados y piel de marfil, que se sonrojaba con la brisa, el verde de sus ojos se cerraba en sonrisa cuando le hacía payasadas, pues era su bufón particcular...haz mohines para mí!! me decía mientras yo sacaba mis mejores caras...era mi hermana mayor, no mucho mas que yo, y en contraste yo era una piel canela de largas piernas, grandes ojos oscuros y un ensotijado cabello castaño, que mi madre mantenía corto porque decía que era indomable como yo...era algo distinta en aquellos tiempos en que las niñas debian ser comedidas y modosas.Mis pies eran demasiado grandes,mis ansias de moverme tambien, demasiado para mantener un vestido impecable, sin romperlo...pronto se dieron por vencidos, y cuándo pasé el disfraz del primera comunión, dejaron de ponerme los pendientes que siempre perdía, y me dejaron en paz escalándo arboles, saltando muros, haciendo patirse de risa a mi hermana-princesa de la torre de márfil, y defendiéndola a veces con mis puños de los crios insolentes que le levantaban la falda...en un mismo dia podía ser peter pan, campanilla, robin de los bosques, incluso la peluquera se su Nancy, que desgraciadamente amaneció un dia sin pelo...

Siempre me supe yo, como era, quien era, y llege a la adoslecencia sin necesitarla, tranquila y apacible, sin rebeldía...atípica adolescente con las camisas de mi padre que pintaba,escribia versos, y su mejor amigo era un batería que nunca consiguió besarla y le regalaba libros de Mafalda...acepté la vida como se me fue dando, a sorbitos, en pequeñas dosis, empecé a equivocarme y a ser feliz...seguí siendo Marie Curie,Rosalia de Castro, Benedetti, Milton Clara Campoamor y Shackespeare...y seguí salvando a los demás sin darme cuenta de que podiá tomar mis propias decisiones.

Hoy pienso a mi hermana, sentada en su jardin leyendo con su dulce vestido de flores, sin demasiados sobresaltos, como mera expectadora de la vida y del tiempo...y ya no me sonríe, ya no me quiere, soy demasiado bohemia, demasiado libre, demasiado feliz...Sé, aún habiendo perdido tanto,que elegí la mejor porción, la opción correcta...y seguiré, escribiendo los libros que ella lee,seguiré siendo yo, sonriendo, siéndo libre y eligiendo...seguiré sintiendome Juana de Arco.

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