Tengo, todas las mariposas del mundo
sin poseerlas, porque son libres...
las que vuelan, las que salen de mi pincel,
las de cristal, las atrapadas en la ciudad...
porque, cada vez que cierro los ojos
siento, tus aleteos en mi corazón...
quizás, tu piel de destellos en mi mirada
es un lugar del tamaño del firmamento,
un universo de cristal infinito,
con mariposas dibujadas para mi.
Fijate que yo a pesar del paso del tiempo aun las sigo teniendo, no he perdido ni una por que todos los dias las cuento y forman parte de mi universo.
ResponderEliminarUn abrazo